Cientos de niños, adolescentes y adultos, quizá sin saberlo, recorren los campos de beisbol que en algún momento fue el lugar donde se originaron las historias que hoy son el recuerdo de muchos deportistas ocotlenses. Esos que jugaban por amor al deporte, el equipo o por pasar un momento agradable con sus familiares y amigos.
Hoy algunos de esos campos no existen más, sin embargo se conservan en la memoria, y con nostalgia muchos evocan aquellas personas que dieron origen al deporte regional, como Nino Jaramillo que hace más de un siglo creo la primera liga de beisbol en Ocotlán. Él dio pie para que cientos de peloteros adoptaran la práctica como una forma de vida. Uno de ellos es Salvador “la rata” Vargas.
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Homenaje a Nino Jaramillo (al centro). Salvador Vargas arrodillado. Colección de Víctor Zúñiga. |
Desde muy joven comenzó a destacar en el beisbol amateur, en la Liga Ocotlense de Beisbol jugando para los equipos de Estopa y Aceite de la estación y Nestlé. Varios parques y unidades deportivas fueron testigos de las hazañas de Salvador, como lo fue el parque Nestlé en donde ahora se encuentra el Colegio Colon, además del Cantarranas y Celanese. Su nivel deportivo y madurez física le sirvieron de escaparate para llegar a la Liga Mexicana con los rojos del México (hoy diablos rojos) en 1944, donde compartió su estancia con grandes jugadores de la talla de Jorge “chorejas” Bravo y Nicolás Torres, todos bajo las órdenes del manager Ernesto Carmona.
“La rata” destacó en todas las posiciones del juego, siendo la de cátcher donde se consolidó como pieza clave del equipo de los rojos. Y en el año de 1947 fue traspasado a las filas del equipo de Guaymas, perteneciente a la Liga del Pacifico.
Enrique Jiménez, cronista de Ocotlán, comenta la razón por la que fue transferido al equipo costero, relata que en un partido en el que los diablos perdían, Ernesto Carmona ordenó que Salvador se ponchara intencionalmente, y “la rata” en el mismo turno bateó un homerun, desobedeciendo al manager.
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La Casa del Beisbolista. Foto: Saúl Mendoza |
Tiempo después, a causa de una lesión, regresaría a su antiguo equipo. Pero no fue el último viaje de Vargas, ya que en 1955 pasó a los Cañeros de los Mochis. A finales de los cincuenta, estando su carrera en declive, pasó a los charros de Jalisco y fue ahí donde finalizó su carrera profesional.
A pesar de que se desconoce la fecha de su fallecimiento, se le recuerda como uno de los deportistas más sobresalientes en la historia de Ocotlán.
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Víctor Zúñiga. Foto: Saúl Mendoza |
Una de las personas que aportó los datos anteriores es a Víctor Zúñiga Salazar, seguidor y promotor del beisbol desde hace más de 60 años y con 11 años de coleccionista: “Esto inició muy curioso, me dijo un amigo Daniel Villarroel, ´Víctor cuándo empezó el beisbol aquí´, pues no sé, pero déjamelo de tarea, y así empecé a recabar datos de la historia”. Él desde la década de los sesenta ha manejado más de 40 equipos de beisbol. Actualmente prepara las ligas infantiles desde los diez a los 15 años de edad. A más de un siglo del inicio del beisbol en la región, Víctor mantiene el recuerdo vivo de la historia del deporte de “la pelota caliente”.
Por: Felipe Romero y Saúl Mendoza